Las pantallas metálicas cilíndricas y estilizadas se montan a distintas alturas y profundidades a partir de una placa posterior circular para conseguir una silueta elegante y minimalista de mediados de siglo. La variedad de acabados (latón patinado, bronce y níquel pulido) complementa cualquier interior, con el níquel pulido funcionando especialmente bien en un tocador o baño. Este versátil aplique de pared de seis luces puede colocarse horizontal o verticalmente.